Todos estamos sometidos al estrés diario. La cantidad de obligaciones y responsabilidades diarias muchas veces convierten al estrés en un estilo de vida.
Tu decides si quieres vivir con estrés o no.
Medita
Aprender a meditar es más sencillo de lo que imaginas. En YouTube o Spotify, puedes encontrar videos o audios que te guiarán en el proceso. La meditación nos beneficia por distintos motivos:
- Mitiga los efectos del estrés
- Afecta positivamente al sistema inmunológico
- Mejora la capacidad de atención y concentración
- Es útil para empatizar con los demás
- Aumenta la tolerancia al dolor
- Mejora la memoria y las funciones cognitivas
- Potencia la aparición de pensamientos positivos
Haz ejercicio
El ejercicio libera dopamina y la serotonina (también conocidas como las «hormonas de la felicidad») en el flujo sanguíneo, que promueven el bienestar emocional y fortalecen la salud mental.
Prueba aceites esenciales
Muchos aceites esenciales cuentan con propiedades calmantes. Puedes, por ejemplo, aplicar unas gotas de aceite esencial de lavanda o eucalipto en un pañuelo y aspirar su aroma de vez en cuando, pues tiene efectos muy relajantes. Lo mismo ocurre si pones unas cuantas gotas en el agua de la bañera. Inténtalo!